Trata la piel con cuidado. Evita colocar el producto sobre superficies ásperas que puedan causar arañazos. Si bien nuestras piezas están diseñadas para el uso diario, evita apretarlas demasiado o forzar la piel, ya que esto puede deformarla con el tiempo.

Se debe evitar el contacto con agua o humedad ya que puede dejar manchas. La piel puede dañarse por el agua, por lo que se aconseja mantener el producto alejado de la lluvia, los derrames y la humedad prolongada.

Ten en cuenta que puede producirse una ligera transferencia de color, especialmente en ambientes húmedos o al usar prendas de colores claros. Esto es particularmente relevante para los artículos con forro de ante.

Guarda tu artículo en su bolsa antipolvo de Mom's Goods cuando no lo estés usando, especialmente de viaje. Evita el contacto con objetos afilados como llaves o joyas que puedan rayar la superficie.

Consérvalo en un lugar fresco y seco, lejos de fuentes de calor y de la luz solar directa, ya que estos pueden provocar que la piel se seque o se decolore.

La piel es un material orgánico que desarrollará su propio carácter con el tiempo. Las marcas y las pequeñas imperfecciones forman parte de su belleza, pero el cuidado adecuado ayudará a mantener su estado.

Para la piel lisa, aplica periódicamente una crema neutra de alta calidad para mantenerla hidratada. Para el ante, utiliza un spray protector diseñado específicamente para este material y un cepillo suave para mantener su textura.

Si su artículo requiere una limpieza profunda, eliminación de manchas o reparación, recomendamos llevarlo a un profesional.